Repensando a la Empresa: Más allá de la maximización de ganancias

Muchos hemos experimentado el placer culposo de estrenar un auto. Las cubiertas sobre los tableros, las fundas de plástico y asientos, el “olor a nuevo” que los autolavados venden ahora como esencia. No sé cuántas personas hayan podido estrenar un avión, pero yo pude hacerlo en 2018. En un vuelo doméstico entre Monterrey y la Ciudad de México estrené uno de los flamantes Boeing 737-MAX de Aeroméxico. El avión olía igual que el auto nuevo y hasta pude quitarle la película protectora a las nuevas pantallas de televisión.